jueves, 12 de abril de 2007

Mejor se hubiera muerto Carlos Fuentes

Hablar de la muerte es inevitable, recientemente perdí a un buen amigo en un accidente y aún me resulta difícil el aceptar que no lo veré más. Uno trata de aligerar un poco la cosa, no hacerla tan solemne, pues a pesar de ser algo fuerte, siempre la pena le queda a los vivos. Decir que Victor se nos adelantó a “enfriar las chelas” me ha servido de mucho; hay a quienes no les extraña mi frase, pues saben de mi actitud irreverente, pero hay otros que lo toman como un insulto, para mi no tiene ese sentido, para mi representa una esperanza de tener una oportunidad más para verlo y charlar con él, de sentir su amistad sincera y de pasar un buen rato más en su compañía.
Por fortuna todo lo que tenía que decir se lo dije en vida, sin perder una oportunidad de hacerle saber de que era un buen amigo y una excelente persona.
No me decidía a escribir esto por muchas razones, pero la principal era el no aceptar la idea de su partida, ahora y con la noticia de que uno de mis escritores favoritos ha muerto, me ha parecido inevitable y necesario hablar de la muerte. Pero no de la tragedia que puede llegar a ser, sino de la reflexión que nos deja a los vivos por hacer algo de nuestra existencia. Victor me enseñó con su ejemplo que puedo ser mejor persona y que serlo no es tan complicado, todo radica en tener buenas intenciones en nuestro actuar. Kurt Vonnegut que no importa que la academia nos dé la espalda, la escritura inteligente siempre flotará y les escupirá en sus educadas y leídas caras.
Ahora leo que la UNAM planea hacer un reality show literario abierto a los jóvenes escritores y no puedo dejar de preguntarme: ¿Cuál es el sentido de este concurso? La convocatoria está abierta a escritores que hayan publicado algo en revistas, libros y demás. Esto me imagino, será como la “Academia” pero en vez de cantantes serán escritores, habrá un jurado que calificará los textos (tareas) que se dejen a lo largo del concurso y que criticarán los trabajos. Escuché al jefe de literatura de la UNAM decir: “...enfrentarlos a la crítica”; no es que la crítica me moleste, (y de molestarme expresaría mi frustración de una forma menos civilizada, a los brillantes críticos jajaja). Pero me parece que el concepto ese de las “Letras libres” no existe del todo. Para ser considerado escritor en mi humilde y muy cuestionada opinión, se debe vivir de las letras, es decir, vivir del oficio de escribir, (nótese que no dije profesión). Claro que espero que el jurado acepte a algunos escritores que viven de escribir relatos cachondos en revistas de colitas como “Mi mejor maestra”, quizá a ellos no los consideren con una imaginación prolífica o mejor dicho, digna de ser desarrollada. También a aquellos que usan su habilidad creativa para escribir los discursos de muchos de nuestros principales líderes políticos, ejecutivos y empresariales, ya que son muy buenos en cuanto a ficción se refiere. Y no se encasillen en escritores “wanna be” que se basan en renombrados (y dije renombrados porque de talentosos no tienen mucho) escritores vivos y con peso “intelectual”, (¿por qué me vendrán a la mente los etnocentristas?). Aquí lo que más me molestaría es que existiera la intención de “enseñarles” a los jóvenes participantes a respetar los rigores de la academia, para que su obra sea “reconocida”. Lo cual me haría enfadarme un poco, pues si algo me ha enseñado la experiencia, es que no siempre los escritores más brillantes son reconocidos por los académicos de las letras, y que no siempre los que sí lo son, representan para el común de los mortales, ser creadores de textos que les sean interesantes.
Aquí me meto en el debate de lo popular y lo artístico, (aunque para mí de nada sirve el arte que no es popular), pero en fin. Yo soy un lego en estos temas de letras, finalmente yo sólo practico la doctrina de leer lo que me agrada y no por darme el taco de entender lo que al parecer alguien tuvo la intención de decir, (eso me recuerda al traje del emperador). Pero ni caso me hagan, mejor lean algo de Kurt Vonnegut, Time Quake es mi sugerencia, quizá ahora alguna editorial se precie en traducirlo al español, sino refínenselo en inglés. Otro que les recomiendo es Breakfast of the champions (hay película si les da hueva leer), otro es Galápagos, aunque a decir verdad en cualquiera de sus libros encontrarán sentido del humor, inteligencia y sobre todo irreverencia.

martes, 10 de abril de 2007

De empresarios a líderes, ¡válgame!

Luego de varios intentos, al fin pude decidirme a ver el programa del canal 40 Líderes mexicanos. Fue difícil pero al final divertido ver la cara del entrevistador cuando el entrevistado (del cual sólo recuerdo que era directivo de Autofin), menciona el nombre de uno de los Saba, familia con la que TV Azteca trae pleito, así que imaginarán el gesto que el distinguido e inteligente interlocutor, lanzó al escuchar del ejecutivo: “mi gran amigo Saba”.
Bueno, al final logré soportar más 23 minutos del más exquisito, distinguido y puro estilo ejecutivo, con todo y presentadora con una falda con el corte muy arriba del muslo, misma que al estar sentada y cruzando las piernas, la dejaba con media nacha afuera, (al parecer para los líderes y la gente interesada en sus vidas, la mujer sigue siendo un objeto sexual, o al menos es lo que debiera ser.)
Por lo demás la vida del susodicho líder no me pareció nada envidiable, trabajo, esfuerzo y sacrificio, son las palabras que utilizó para definir el camino hacia su importante posición. Trabajar desde los 7 años y sentirse útil, fue lo que lo impulsó a seguir esa vereda que lo ha llevado al éxito. Habló también de la actitud que debe tener un alto ejecutivo, el de no necesitar socios para desarrollarse como empresa y el de centralizar las decisiones. Su actual proyecto es uno llamado Mansión Imperial (lindo nombre, ya se imaginarán a quienes va dirigido) y consta de la construcción en Acapulco de un complejo que engloba varias empresas, entre ellas un centro de convenciones, playas privadas y un hotel de tipo spa clínica, con medicinas alternativas para que el ejecutivo de hoy se cure de su estrés (ocasionado por las grandes presiones de la vida de consumo).
Me surgen muchas preguntas de lo observado esta noche, una de ellas es si realmente a este señor se le puede llamar líder mexicano, quizá yo le pondría otra denominación para definirlo mejor y no caer en dudas. Líder empresarial mexicano; esa es una denominación que para mi gusto lo describe mejor. Claro que la ecología no le preocupa mucho al señor, pues el impacto que sus 5000 automóviles vendidos al mes tiene sobre el calentamiento global, no parece inquietarle tanto como la construcción de su mega proyecto vacacional, del que desde luego no hizo comentario alguno sobre el impacto ecológico que tendrá en la zona. Recordemos que las terapias chinas no son muy famosas por el respeto a los animales.
Pero supongamos que no se preocupa por ello debido a que confía en la tecnología aplicada a los motores de combustión interna y que la Mansión Imperial, (nombre de muy mal gusto, espero que al mercadólogo lo cuelguen de los pulgares por sugerirlo, aunque estoy casi seguro que fue idea de nuestro brillante líder empresarial mexicano); cuenta con el estudio correspondiente del impacto ambiental que ha certificado una seria y honesta secretaría de ecología. Y que la labor de tan distinguido personaje generando utilidades mediante el cobro de una honrada y generosa tasa por el dinero prestado, es digna de ser imitada por miles de mexicanos que desean salir del anonimato para convertirse en brillantes líderes mexicanos.
Podría seguirlos aburriendo más con la cortinilla de entrada del programa en la que se puede ver de primer instancia a Salinas Pliego, Carlos Salinas de Gortari, Vicente Fox y Carlos Slim entre otros muchos (por cierto que en un programa anterior, la entrevista fue a Benny Ibarra, considerado otro líder mexicano, comprenderán por qué me había costado tanto trabajo ver un programa completo) y con muchas otras cosas como los comerciales de asepsia, movie star y esposas desesperadas en el canal 7, pero quisiera que les queden ganas de seguirme leyendo.
Luego le sigo con el canal 40, que ofrece material para rato, claro, gracias a sus inteligentes y representativos conductores.

lunes, 9 de abril de 2007

Lo "vergonzoso" e "insultante"

Las playas montadas en el DF han sido materia de debate para muchos. De “populistas”, "vergonzosas", "insultantes" y “poco higiénicas” no las bajan aquellos que presumen de tener “vergüenza”. Pero más allá de las “buenas costumbres” y las vacaciones “dignas”, me parecen una buena respuesta para fomentar la convivencia y la recuperación de espacios públicos perdidos. Y a pesar de que un glorioso empresario mexicano ocupe el 3er lugar en la lista de los multimillonarios del mundo. La verdad es que más del 65% de la población en la ciudad de México no goza de un salario suficiente, ni del tiempo que le permita acudir a zonas turísticas. No estoy de acuerdo en muchos puntos con el actual jefe de gobierno del DF, pero esta solución me ha parecido acertada, al igual que su idea de fomentar el uso de la bicicleta como medio alternativo de transporte. Recuperar la ciudad es labor de todos, hasta de los que le tienen terror a las calles y prefieren pasar el tiempo aislados de su ciudad dentro de cómodos autos con aire acondicionado, excluyéndose de la sociedad escondidos tras la comodidad y la “seguridad” que les otorga su poder adquisitivo. Mismos que ni como broma se atreverían poner un pie (salvo sí son representantes electos democráticamente, dispuestos a tomar partido a “favor” de la sociedad) en una playa artificial en plena zona popular.
Dividir a la comunidad por medio de argumentos políticos será una constante a lo largo de este sexenio, así como los discursos de “liderazgo”, “responsabilidad” y “esfuerzo”. En un México que se avecina complicado, no hay mejor descanso que la convivencia y la inclusión de los distintos estratos sociales en un solo proyecto, el de hacer esta ciudad más habitable para devolverle un poco de ese equilibrio ecológico que alguna vez hace 1500 años tuvo.
Ahora la para la mega fiesta de 15 años, no faltará quien comience a decir que es una acción populista, vergonzosa e insultante para los mexicanos, claro, para quien lo dice no será vergonzoso ni insultante que un mexicano sea el 3er hombre más rico del mundo a costa de 70 millones de pobres. Eso sólo puede suceder en mi país.